María Natalia es una chef profesional. Estudió en la famosa escuela de cocina Gato Dumas y se capacitó en el Instituto Culinary de Chile, se destaca en las redes sociales por estar siempre al natural y al momento de cocinar, sólo utiliza su delantal.
Mejor conocida como Talita Chef, trabajó en uno de los mejores hoteles de Nueva Zelanda. Fue censurada varias veces en sus redes sociales por su contenido acerca del cannabis. Tuvo su primera experiencia en la cocina cannábica a los 13 años. Como su mamá tenía talleres de pintura, Talita aprovechaba y preparaba galletas de salvado para convidar. “Mamá venía con un condimento muy raro para mí. No entendía lo que era, pero me decía que le ponga en la galleta ese ingrediente especial”, relata Talita.
En su momento, no le gusto la experiencia ya que tenía olores raros y por un tiempo no cocinó con cannabis. Pero a los 30 años, Talita realizó una meditación en Nueva Zelanda que le cambió la visión de las cosas. “Fueron 10 días sin hablar, ni tener contacto visual con otros”. Allí despertaron sus conocimientos sobre la marihuana y comenzó su carrera de chef cannábica.
Hoy en día es madre y tiene su programa de radio: “El show de Talita Chef”, que se escucha todos los viernes por PelaGatos, una radio sobre reggae y música urbana/alternativa.
¿Qué te inspiró a cocinar con cannabis?
- “En la adolescencia, mi mamá me inició a consumir plantas sagradas y medicinales como “Ayahuasca” y “San Pedro”. Me hicieron tan bien a mi salud que me interesó seguir en contacto con
estas, así que las llevé a la cocina. Me pareció inspirador incluir plantas medicinales en la comida, para que el alimento sea la medicina y la medicina el alimento.
En el cannabis sativa encontré muchas respuestas y beneficios para hacer medicina preventiva para no enfermar”.
¿Tuviste problemas con la Policía o vecinos para cultivar?
- “Cuando estaba embarazada de cuatro meses, volvía junto a Dr. Sativa (esposo de Talita) de Salta, de dar talleres de cultivo y cocina. En las valijas, yo llevaba los utensilios y los productos con los que trabajo, como aceites fusionados con otras hierbas, tinturas, aceites macerados, etc. Los quería traer para Buenos Aires ya que esos productos me hacen bien a la salud.
Un amigo que estuvo en los talleres me regaló un “pikachu” de color rosa. Sabía que me gusta ese color y lo hizo con toda la buena intención. En el escáner del aeropuerto se vio que contenía 0,37 gramos de hierba, pero yo ni siquiera fumo. Pero me abrieron la valija, trajeron a los perros y me revisaron todo. Me trataron de delincuente y de narcotraficante, hasta me abrieron una causa. Pero hoy en día ya puedo cultivar tranquilamente”.
¿Qué opinas del autocultivo?
- “Uno tiene que hacer lo que le haga bien, cultivar es un derecho natural. Nadie te puede decir qué planta podés tener en tu casa, para comer o hacer lo que quieras, es ridículo. Yo cultivo pero
porque tengo una indicación médica. Además, soy un ser humano que ama las plantas, tengo cannabis
sativa, aloe vera y otras plantas medicinales que utilizo en mi cocina.
A la hora de pedir la legalización, hay que ver qué viene con la ley. Tiene que ser una regulación que nos beneficie a todos y no sólo a las farmacéuticas. Muchos productores de pequeñas empresas
quieren vender aceites, cremas, productos para el cuidado de la plata, etc., y son penados por la ley. Por eso a la hora de que se legalice todos tenemos que tener el mismo beneficio”.
En los talleres que realizas, ¿recibís pacientes que consuman aceite de cannabis?
- “Si, en los talleres que hago hay mucha gente que consume el aceite medicinal. También quieren probar la cocina porque es muy efectiva, tiene efecto en los dolores y para descansar bien son muy
potentes”.
¿Qué es lo más importante en la cocina cannábica?
- “Lo primero es la dosificación. Después la descarboxilación, que es
si volvés psicoactiva o no alguna parte de la planta puntualmente hojas y flores. El tercer punto es que se utiliza toda la planta, inclusive las raíces, para hacer tinturas madre o hacer polvos
para hacer currys. Quiere decir que toda la planta de cannabis sativa se consume. Lo importante de la cocina cannábica es que es el futuro, no sólo para lo psicoactivo de estar “re loco”,
sino para el uso medicinal ya que restablece el equilibrio del organismo cuando se ha perdido”.
¿Crees que con el nuevo gobierno cambiarán las leyes acerca de la despenalización de la marihuana?
- “Si son inteligentes en este nuevo gobierno, sí. Gran parte de la población los va a amar si lo legalizan, es una ridiculez que haya gente presa por cultivar plantas medicinales, todos tenemos
derechos a cultivar en nuestra casa, sin molestar a nadie. La ley que salga debe contemplar que los emprendedores vendan sus propios productos con cannabis, y no dudar. A mi me encantaría vender
los míos propios con la gran experiencia que tengo".
La clave de la cocina cannábica saludable es la Dosificación, se recomienda consumir microdosis diarias en la dieta, con la intención de optimizar nuestro sistema endocannabinoide.
Para una persona de 70kg que NO está acostumbrada al efecto de la marihuana se recomienda entre 0,1 a 0,5 gramos de cogollos por día y para aquellos que son usuarios habituales de 1 a 2,5
gramos de cogollos, siendo esta una ALTA dosis.
La medicina con cannabis es PERSONAL, cada organismo es diferente y la dosis debe ajustarla cada quien para su bienestar.